Palabras Inauguración del seminario internacional "filosofìa y educación" enero 2007

PALABRAS DE INAUGURACIÓN
SEMINARIO INTERNACIONAL DE PROFESORES DE FILOSOFÍA
FILOSOFÍA Y EDUCACIÓN

Distinguidas Autoridades,
Colegas de Chile y el extranjero,
Estudiantes de Filosofía,
Señoras y Señores

Esta mañana que es la puerta de entrada al SEMINARIO INTERNACIONAL DE PROFESORES DE FILOSOFÍA, quiero reconocer a las organizadoras pilares de este seminario, Olga Grau y Patricia Bonzi como también a las universidades e instituciones que la respaldan, que en mis 7 años de ejercicio pedagógico por primera vez que las universidades están realmente organizando lo que corresponde, en el sentido de realizar una capacitación intensa, pertinente a la enseñanza de la filosofía con la participación activa de los profesores de Chile y con la posibilidad de intercambiar experiencia con profesores de filosofía de América Latina y de otros lugares del mundo.

En esta ocasión:
No quiero concentrar estas palabras en los problemas y dificultades que ha vivido la práctica de filosofía en las últimas décadas.

No quiero repetir majaderamente que los gobiernos “democráticos” han llevado a la presencia de la filosofía en Chile a una cada vez más patente desintegración y autoeliminación dentro de las escuelas, mayor aún cuando en mi país la tendencia de las políticas educacionales es abrir colegios técnicos-profesionales. En donde la filosofía sencillamente NO EXISTE debido al DESCRITERIO de aquellos que elaboraron los planes y programas.

Tampoco quiero referirme a la responsabilidad que tienen las universidades que siendo testigos mudos de esta patética verdad, durante tantos años, han abierto más plazas de la enseñanza de la filosofía, por la alta demanda e interés de la juventud, mientras que los profesores hoy estamos quedando sin trabajo en las escuelas, o por la escasez de horas que existen dentro de los programas, o por la inconveniencia económica de tener que trabajar unas pocas horas, o por lo que es más grave aún, el despido de profesores por representar a las autoridades educativas las prácticas anti-democráticas, el descontento de las condiciones de enseñanza y ejercicio de la profesión en malas condiciones.


Menos recordar el Día Internacional de la Filosofía organizado por la UNESCO, cuando el Presidente Lagos, en la ocasión, CELEBRABA la PRÁCTICA FILOSÓFICA mientras que en nuestro país, se planificaba el cierre de la filosofía de la educación de adultos y el progresivo cambio de ésta por los Programas Basura como “Chile Califica”. Y nosotros recibíamos sumisos, toda el baño de hipocresía y simulacro puesto en escena.

Me parece que no es el momento para hablar del centralismo del conocimiento. Ni de los invisibles fondos para la investigación. Ni de la escasez del material y libros para la enseñanza. Ni incluso de la imposición de los contenidos obligatorios. Ni de la nula participación de los profesores en los programas educativos. Ni menos de las murallas de fierro que existen para realizar un curso de postgrado limitado por los grandes costos que implica. Menos aún denunciar la acentuada discriminación en la enseñanza de la “filosofìa para niños” que no se imparte en la educación municipalizada.

ESTE NO ES EL MOMENTO NI LA OCASIÓN.

Ésta es una instancia en donde se abre otra realidad, hemos de darnos vuelta los ojos hacia adentro, hacia nosotros mismos, la situación “afuera” está bombardeada de acciones que el modelo perverso ya lo ha derruido todo, sus propias estructuras creadas en post del beneficio personal privatizador, está en proceso de caída, los mismos estudiantes se han levantado ante FRACASO DE LA EDUCACIÓN, justamente por su carácter deshumanizante.

Nosotros mismos debemos estar atentos, recoger los principios más puros de la filosofía de nuestras raíces, practicar el TREPELAIMIDUAM (del mapudungun ancestral), que quiere decir mantener la mente despierta, vigilarse a sí mismo, estar atentos y llenos de asombro hacia lo que nos acontece, sin más, REENCONTRAR EL PROCESO DE DESCUBRIMIENTO DE NUESTRAS HABILIDADES DE INTERPRETAR EL MUNDO, pero sobretodo, CREAR LAS ESTRATEGIAS DE RESISTENCIA ANTE LA PROBLEMÁTICA, tal cuál como las palmeras chilensis han sobrevivido a los incendios depredadores, muchas veces intencionados, y ellas vuelven a crecer por la gran cantidad de agua que guardan en sus interiores, nosotros, nosotras profesoras, debemos hoy sacar la vertiente que tenemos dentro y volver a humedecer la tierra en que estamos paramos, es nuestro deber DESPERTAR.


Decir TREPELAIMIDUAM, que significa también “estallido de chispas en dirección de una persona”. Urge que la filosofía prenda en nosotros, y que el viento que desparraman nuestras chispas provengan de todas y todos los maestro que se la jugaron, lucharon, hasta dieron su vida por la enseñanza del pensamiento, tenemos que continuamente trabajar, investigar, soñar, escribir, para no perder el fuego que llevamos dentro y poder iluminar.

TREPELAIMIDUAM también corresponde a la idea de “encontrar”, “hallar”, “ver”, en este sentido, tenemos que descubrir en nosotros, en los y las alumnas, el tesoro que cada uno tiene para toda la vida, que es cuando se abre el capullo del autodescubrimiento de lo que pensamos, de aquella piedra preciosa filosofal que nos permite elegir, decidir el camino a tomar, proyectar nuestros acciones, en CONSECUENCIA con nuestro pensar, decir y hacer.

Esta misma palabra “TREPELAIMIDUAM” es un modo de ser, de “estar alegre” , de ahí que filosofía nos otorgue un OASIS DE FUERZA, tenemos que CULTIVAR LA VITALIDAD, y traspasar ese aliento a nuestros estudiantes cuando revelan la inmensa magia de poder decir lo que piensan y más aún argumentar por qué lo piensan.

Y aquí me detengo para señalar la urgente necesidad de cambiar la imagen del “pensador agotado” del “intelectual con las manos agarrándose la cabeza frente al escritorio”, “ del profesor en las nubes” , al contrario, sacar de nosotros “buen humor” transformándose en un bálsamo para el nacimiento de las palabras y las acciones

Es el momento de decir TREPELAIMIDUAM, debemos tener la mente más despierta que nunca, que TODOS LOS ASESINOS NO HAN MUERTO y siguen día a día ejerciendo y tramando LA EVAPORACIÓN del derecho autónomo de aprender a pensar, ya son MILES LOS PENSAMIENTOS DESAPARECIDOS, y quienes sino nosotros somos los que debemos defender la filosofía.

AUTORIDADES
Ustedes son los responsables de las pérdidas de horas de filosofía en el sistema educacional chileno.
La filosofía no es un ramo MÁS que sirva para trabajar y ser un “objeto” funcional al sistema, al contrario, la recuperación de la enseñanza de filosofía constituye un deber para el gobierno, ya que sólo así, los niños, las niñas, los jóvenes podrán ser personas creativas, críticas, pensantes y transformadoras de la realidad.

Marcela Velasco Menares.